lunes, 27 de febrero de 2012

ENTREVISTA CON UNA CABALLA CENTENARIA

26 de Febrero 2012

A las 17,00 horas me presenté en la Residencia, sita en un lugar de la Costa del Sol, donde Doña Concha me esperaba tras su hora de merienda, como habíamos convenido. Esta señora, con sus 100 años, y muy cerca de cumplir los 101, elegantemente vestida como si fuera a salir a dar un paseo, me recibió acompañada de su andador que le ayuda es sus cortos desplazamientos, pienso que más por precaución que por necesidad. De aspecto dulce y señorial al mismo tiempo, le tendí mi mano y presentándome, la saludé cortésmente. Nos dirigimos en ascensor a una planta inferior, donde nos sentamos a charlar en un acogedor salón que por el momento permanecía solitario. Le llevé un pequeño portarretrato con la imagen de Nuestra Señora de África, que inmediatamente besó y me agradeció.

Desde un primer momento me inspiró serenidad al mismo tiempo que admiración, pues a sus años tiene una mente prodigiosa, recordando hechos, nombres y apellidos de personas y un sinfín de detalles remóntándose incluso al lugar donde nació, que fue en el Paseo de la Muralla mas conocido por Paseo de Las Palmeras, más o menos a la medicación de este. Recuerdos de donde posteriormente vivió, en el Callejón del Obispo, hoy calle Millan Astray. Su padre, maestro nacional de Vejer de la Frontera (Cádiz), su madre de la misma provincia; Jerez de la Frontera, ella primera hija del matrimonio, del que mas tarde llegarían otros tres hermanos. Estudió en su juventud enfermería, así como piano. Creo recordar que se casó a los 29 años con un navarro; Fermín Alonso Curiases, maestro y poeta, que aprendió árabe en su estancia en Marruecos. Tuvieron 5 hijos de los cuales sólo dos viven, Conchita y Fermín, ya que los otros fallecieron con pocos meses por enfermedades de la época, que hoy no tendrían la mayor gravedad. Tras la independencia del país vecino, volvieron a Ceuta, donde residieron hasta el fallecimiento de su esposa en el año 1997 que
trasladó su residencia a la península.

Recuerda que en su calle y muy cerca de la Marina, estaba la Aduana, así como una sinagoga y naturalmente la Vicaría y la residencia del Obispo que era la casa de los Dragones, donde estuvo el Casino Hispano-marroquí. Me confirma en enclave del antiguo colegio de la Inmaculada, al cual se accedía a través de una huerta, que cuidaban las propias monjas, con una pequeña casilla para los aperos de labranza a mano derecha.

La casa donde vivieron sus padres había sido ocupada anteriormente por una familia inglesa que eran masones y que al estallar la guerra mundial, llegaron unos barcos que se llevaron a todos los ingleses a Gibraltar. La familia ocupó esta amplia casa, de planta baja y piso superior, donde más tarde situaría su consulta su hijo Adulfo Sanchez. Buena conocedora de los alrededores, recuerda pero sin saber el motivo, que a la calle Pedro de Meneses, se la conocía por “Calle del Rojo”. Conoció el patio “Cerni” y el Patio “Cineluz”, zona conocida por “la plazoleta”. Se refirió igualmente al Bar “La Cordobesa” y que el que fuera el “Hotel Terminus”, con anterioridad fue una “Casa del Torno”, donde depositaban a los recién nacidos no deseados o imposibles de mantener.

Aún no habiendo conseguido información de algún patio, ha sido un gran placer hablar con esta caballa y disfrutar hablando de temas ceutíes, que para los que estamos ausente nos da vida. Le comenté que hay otra caballa viviendo en Torremolinos con 102 años y según mi secretario en Ceuta, me hizo saber días pasados otra señora de edad similar viviendo en Ceuta, lo que hace ya tres centenarias ceutíes.

Mi querida Conchita, ha sido un gran placer conocerla y le deseo que siga manteniéndose Vd. igual que ahora.

José Javier Rivera

domingo, 26 de febrero de 2012

Curiosidades ceutiés

Arroyo del Infierno se ubica del Serrallo a Playa Benitez.

Miguel Molina, guitarrista, nacido en Ceuta en 1949, se marchó pronto al lugar que siempre consideraría el patio de su casa, el barrio de Triana, de Sevilla.

Francisco Romero Rodriguez, siendo Presidente del Centro Hijos de Ceuta, inicio la costumbre de obsequiar a los ilustres visitantes al Centro con la Caballa de Oro, joya que se diseño para la sociedad y que hoy se ha convertido en seña de identidad.

El Casino de Suboficiales o de Clases, estaba en la casa de los Guillen, encima del Campanero Grande. Se trasladó a la casa de Trujillo en 1928 al favorecer el premio gordo de lotería de 5 de enero, con el número 40.897, a 15 pesetas el décimo y tocó toda la serie. Muchos compraron casas nuevas en Villa Jovita. Tres dormitorios, cuarto de baño y terraza, costaba 2.500 Pesetas.

El Centro Hijos de Ceuta y Casino de Suboficiales fueron los primeros inquilinos de la Casa de Trujillo, aún cuando no estaban instaladas las barandillas de las escaleras. Centro Hijos Ceuta. A la izquierda. Casino a la derecha,donde
posteriormente se instaló el Banco Popular.

Don Teofilo Escribano, fue entre otros uno de los perjudicados en la depuración que se llevó a cabo en la Escuela de Magisterio de Ceuta, un 17 de Julio de 1936.

viernes, 24 de febrero de 2012

CURIOSIDADES CEUTIES, CONTINUACION

El edificio Trujillo, llamado “del millon” tuvo un coste de 1.640.000 ptas. Candido Mata autor de los trabajos de estuco.

Antonio Martin de la Escalera, de la patronal. Fue cronista de la ciudad

Luis Utor Curbelo, farmacéutico.

Herminio Culebras, dueño Patio Culebras en calle Fernandez.

Antonio Ballesteros Ledo, Medico de Beneficencia.

Julian Francisco de las Heras Jimenez (1868-1936), fue Alcalde de Ceuta de 1907 a 1909.

Antonia Castillo Gomez, tras la guerra civil la primera mujer médico (tocóloga).

Elena Perales fue la primera farmacéutica en Ceuta

En calle Padilla estuvo el Barrio de los Moros.

Calle Juego de Bolos: Parece ser que antiguamente, los dueños de las pequeñas tiendas, en su mayoría cántabros, se reunían los domingos después de cerrar la tienda a su juego tradicional: los bolos.

domingo, 19 de febrero de 2012

Más curiosidades ceutíes

Paco “el de las avellanas” que las vendía por las tardes. En las mañanas era aguador, como África y su hermano Ventura.

Lamberto Amador Ventura, hermano de Pedro Amador, vivió cerca del Patio Los Burros en Calle Simoa, En su vejez tuvo sus facultades mentales mermadas.

Enrique Cortes era el dueño del Bar Juanichi, en la playa de la Peña.

Huerta Martinez era propiedad de Miguel Gil Valverde.

La barriada Villa Jovita, debe su nombre a Doña Jovita Casares.

Calle Alfau, había dos edificios propiedad de los Trujillo.

Jacob Benasayag Azulay, era banquero.

El poblado Marinero, situado entre el puerto pesquero y el parque Mediterráneo, ha sido obra del arquitecto Francisco J. Perez Buades.

Pepe Roldan, tiene una calle en Plaza de África. Era bordador y gran promotor de una hermandad.

David Schiriqui copió las inscripciones que aun existían de las distintas lápidas de la ciudad.

viernes, 17 de febrero de 2012

Anédotas, fechas, acontecimientos, etc. CEUTA

Jose Aguilar Gentil, era el encargado de llevar los locos al Manicomio de Cádiz.

Villa Comandaria es la actual Almadraba.

Salvador Pousa, tenía un taller en la Plaza Ruiz, de reparación de muñecas.

En 1961, 400 chabolas fueron demolidas del barrio Foso San Felipe, y las familias trasladadas hacia la barriada de Terrones, traslado que se hizo con ayuda del camiones municipales y militares.

Una tal Teresa, “la Loca” que tenía disminuidas sus facultades mentales, iba cada tarde a recibir “La Paloma” buque que hacía el trayecto Algeciras-Ceuta-Algeciras, a esperar a su hijo. Solía preguntar: ¿sabe Ud. si mi Juan llega hoy?

Los autobuses de linea de Ceuta eran ingleses con el volante a la derecha, se les llamó “Popi”.

“Callejón de los gallos” calle Millan Astray esquina Solis. El Circo “Los Amigos” con su propio reglamento, era hecho en octavillas en el año 1925 por la imprenta de José Guerra.

DOS AÑOS DE GESTIOM.......(El Faro 9/02/12)

En estos primeros días del mes de Febrero de 2012, cumpliré 2 años de gestión, indagando sobre los antiguos y desaparecidos Patios de Ceuta.

Todo ocurrió en uno de mis viajes a la ciudad, a la cual hacía algún tiempo que no iba; creo que fue en la oficina de Información turística donde vi algunos ejemplares de libros sobre nuestra ciudad, expuestos para su venta. Reconocí al autor de uno de ellos, y por el título se deducía que trataba de la historia de su familia desde su llegada a Ceuta. En ese instante pregunté, no sé como vino esa idea a mi mente, si había algún libro sobre los antiguos patios de Ceuta. Recibí una contestación en sentido negativo.

Días después, ya en mi localidad de residencia y participando en un foro de gente caballa, del que era asiduo, planteé la misma pregunta. Fueron varios “foreros” los que me contestaron negativamente, excepto uno que fue algo más lejos y me envió una lista de patios que hacía tiempo tenía confeccionada y que a modo de “lance” me dijo: “Ahí tienes esta lista de patios; puedes continuar”. El autor de este afectuoso desafió, era mi ahora buen amigo Antonio Breviatti, a quien le debo en gran parte haberme sumergido en esta ocupación, que día a día me está apasionando más y más.

Esa lista que tenía una docena de patios, se ha convertido hoy, 24 meses después, en otra que cuenta con más de 150 patios, de los que -como todo ceutí sabe- apenas quedan media docena de ellos habitados, Los demás fueron pasto de la picota, excavadora y del cemento. Hemos perdido un gran patrimonio, no cultural, pero si tradicional por las costumbres y forma de vida en esos patios. Pienso que con este trabajo que estoy haciendo, al menos no se pierde completamente su recuerdo y ello gracias a ña colaboración de cientos de personas, la gran mayoría ceutíes de edad avanzada, que han posibilitado el ir recuperando, aunque sea en la memoria, aquellos lugares donde tantas personas vivían, convivían día a día en una relación de trato y conocimiento desconocido en nuestro mundo actual .

¿ Cual es el “balance” de estos dos años ?:
-Más de 150 patios localizados.
-Más de 5.000 llamadas telefónicas.
-Un fichero con más de 600 personas contactadas.
-Casi 200 “certificados” emitidos a colaboradores, en señal de agradecimiento.
-Una decena de viajes a Ceuta, donde he tratado de conocer a esos informadores anónimos que vía
teléfono me han aportado datos, fotos, documentos, etc.
-Infinidad de viejos amigos hallados y el nacimiento de nuevas amistades.
-Las horas dedicadas a que este proyecto sea una realidad y las satisfacciones que diariamente me
ha proporcionado esta dedicación.

Puede que alguno se pregunte el motivo de lo escrito y la verdad es que creo que la respuesta es sencilla:

-Quiero dar las gracias a todos cuantos han colaborado para que pueda llevar adelante este trabajo (tantas y tantas
personas anónimas o no, periódicos ceutíes, amigos, familiares, etc.). Hace año y medio, cuando apenas empecé
este trabajo, agradecí públicamente la atención recibida (“El Faro de Ceuta” en “Carta abierta a la ciudad de
Ceuta” 5/08/10), hoy lo hago nuevamente con más conocimiento de causa.

-Pretendo que lo dicho sirva para que cualquier caballa que lo lea y sepa algo de los patios de Ceuta, no dude en
contactarme y darme la información de que disponga. Gracias anticipadas.


José Javier Rivera